Ingredientes:
Pasta azucarada preparada con 200 g de harina, 130 g de mantequilla, 80 g de azúcar blanquilla y 1 yema de huevo (la pasta azucarada viene a ser algo parecido a la masa quebrada)
4 huevos, claras separadas de las yemas
100 g de azúcar blanquilla
250 g de queso crema
250 g de requesón
piel rallada de 1 limón
60 g de harina
4 cucharadas de crema agria (que yo sustituí por yogur natural)
azúcar lustre para tamizar
Preparación:
Prepare la pasta azucarada y forre con ella la base de un molde desmontable de 25 cm previamente engrasada.
Pinche la pasta y enfríela 30 minutos; acto seguido, hornéela 10 minutos a 170ªC.
Bata las yemas y el azúcar blanquilla hasta que la mezcla blanquee y esté espumosa. Incorpórela gradualmente y sin dejar nunca de batir los quesos crema requesón y la piel de limón. Tamice la harina sobre la mezcla, mézclelo e incorpore la crema agria.
Bata las claras de huevo hasta que estén firmes y mézclelas con la preparación. Viértala sobre el fondo de tarta y hornéela a 160ºC durante 90 minutos, o hasta que el pastel esté dorado y cuajado.
Déjelo enfriar en el molde. Enfríelo varias horas y tamice por encima azúcar lustre antes de servir.
Este tipo de pastel de queso tiende a encogerse al enfriarse.
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